Silvia Rocío Delgado García, quien formó parte del equipo legal de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, quiere convertirse en jueza penal local. Organizaciones civiles ya lanzaron alertas por su perfil y vínculos con el crimen organizado.
En medio del arranque de las campañas rumbo a la elección judicial del próximo 1 de junio en Chihuahua, ha comenzado a tomar fuerza un nombre que enciende las alarmas: el de Silvia Rocío Delgado García. Se trata nada menos que de la abogada que en 2016 se unió a la defensa del exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, y que ahora busca convertirse en jueza penal.
Delgado García fue propuesta por el Comité del Poder Ejecutivo estatal, y aunque no cuenta con experiencia previa dentro del Poder Judicial, sí ha tenido un rol activo en casos de alto perfil relacionados con el narcotráfico. La organización civil Defensorxs ya la catalogó como un “perfil de alto riesgo”, debido a su historial como defensora de presuntos narcotraficantes.
Además de su participación en la defensa del capo sinaloense, Silvia Delgado ha aparecido en un documental sobre narcoabogados en México y Colombia. En él, se refiere a ‘El Chapo’ como una persona “amable” y con “causa social”, y sugiere que su juicio fue un espectáculo mediático para satisfacer a Donald Trump. También se le ha visto en fotografías junto a Emma Coronel, esposa del capo, y ha mostrado en redes sociales un notable orgullo por haber sido parte de ese equipo legal.
Delgado García es egresada de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), con una maestría por la Universidad de Durango y una especialidad en Mediación por el Tribunal Superior de Justicia del Estado. A pesar de su preparación académica, lo que genera mayor controversia es el entorno criminal con el que ha tenido cercanía profesional y pública.
Mientras el proceso judicial avanza, la posibilidad de que una figura con este tipo de antecedentes acceda a una posición clave en el sistema de justicia local ha encendido focos rojos en distintos sectores. La pregunta queda en el aire: ¿puede alguien que defendió al narcotráfico juzgar con imparcialidad?




