Un doble ataque con misiles rusos contra la ciudad ucraniana de Sumy, al noreste de Kyiv, dejó al menos 34 muertos y 117 heridos, según el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania.
El bombardeo, que ocurrió alrededor de las 10:15 a.m. hora local, impactó directamente en los alrededores de la Universidad Estatal de Sumy. Las autoridades confirmaron que se utilizaron misiles balísticos Iskander-M/KN-23.
Uno de los misiles destruyó un centro de congresos muy concurrido. “Se usaba para clases, talleres y actividades educativas. Era un espacio abierto para toda la ciudad”, declaró un residente local a la BBC.
Hasta ahora, al menos 51 edificios han resultado dañados, incluyendo escuelas, cafeterías, comercios, automóviles, tranvías y cinco bloques de departamentos. Entre las víctimas hay dos niños fallecidos y al menos 15 menores heridos. Las autoridades no descartan que la cifra de muertos aumente.
Este es uno de los ataques más letales registrados en los últimos meses en Ucrania. A pesar de la magnitud del daño, el Kremlin no ha emitido ninguna declaración oficial.
“Rusia quiere prolongar esta guerra con terror”: Zelensky
El presidente Volodymyr Zelensky condenó el ataque, ocurrido durante las celebraciones del Domingo de Ramos, y pidió al mundo no guardar silencio.
“Lo que se necesita es una actitud hacia Rusia como la que merece un terrorista”, afirmó el mandatario. “Sin presión sobre el agresor, la paz es imposible”.
Por su parte, el ministro ucraniano de Exteriores, Andrii Sybiha, calificó el bombardeo como “una maldad absoluta” por realizarse en una fecha sagrada para los cristianos, y señaló que están documentando el ataque como un crimen de guerra.
El enviado de EE.UU. para Ucrania, Keith Kellogg, declaró que este acto “cruza cualquier línea de decencia”, mientras que el secretario de Estado, Marco Rubio, lo llamó un “trágico recordatorio” de la necesidad de buscar una paz duradera.
Sumy es una ciudad clave ubicada cerca de la frontera con Rusia, en la región de Kursk. En agosto de 2024, Ucrania recuperó zonas estratégicas en esa área, y se teme que Moscú esté preparando una nueva ofensiva.



